Recuperando un poco la costumbre de subir cosas acá, y superado el corte de luz que hizo desear que el Sr. Edenor esté atado a una silla, rodeado de barriles de combustible. Porque no interesa si el pequeño Gambol puede o no llevarle unos centavos a su abuelita. NO! Se trata de enviar un mensaje. Uno claro, bien fuerte. Que ponga un precedente para quienes creen en un mundo razonable. Yo no. Mi razón se fue hace tiempo.
Con un truco de magia.
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